lunes, marzo 22, 2010

Despertar


A lo lejos se escucha, es ese sonido muchas veces odiado que avisa con todas sus ganas que una nueva semana comienza.
Con el cuerpo inmensamente pesado, lentamente comienza el proceso de pasar de una posición horizontal a una posición vertical. El movimiento de los mienbros es forzoso, como si se trataran de despegar de un inmenso adhesivo que ocupa el lugar del colchón.
Una vez sentado, una mano se acerca al rostro, empujando fuertemente la palma y recorriéndolo hacia abajo, intentado arrastrar consigo toda esa pesadumbre.
Al lograr ponerse de pie, comienza otro proceso, rutinario y quizás inconsciente. Se abren puertas, se sacan objetos y prendas. Paso a paso el proceso espabila, hasta tener conciencia completa.
Dependiendo de las condiciones del día, del tiempo perdido o de la demora de despegarse de ese inmenso adhesivo, el horario de salida va variando, de a poco todo se está volviendo más real. Por lo menos ya está de pie.
Sorpresivamente algo quiebra la rutina mañanera. A lo lejos se escucha ese sonido, muchas veces odiado que avisa con todas sus ganas que una nueva semana comienza. Ha llegado la hora de despertar.

1 comentario:

Flor de LIZZ dijo...

Yo siempre he dicho q la cama o el nido, como le digo yo, tiene una gravedad diferente al entorno, obviamente mayor, mucho mayor (como esa camara en la q solian entrenar Goku y Vegeta) y q esta fuerza de gravedad es directamente proporcional a la necesidad q tengas de levantarte rapido; paso seguido, apretamos snooze y dormimos unos minutitos mas...